La vacuna anti-obesidad, de origen alemán, logra controlar los niveles de colesterol y triglicéricos en sangre, evitando que se depositen como tejido adiposo y llevando la grasa por medio de la linda y venaspara eliminarlo por vías naturales del cuerpo, sin efectos colaterales ni tóxicos.
Son 15 inyecciones, cuya formulación se basa en cadenas de aminoácidos que aumentan el metabolismo de los triglicéridos para romper las uniones intereluiares de los adiposítos de manera generalizada, facilitando su eliminación. Además de reducir la grasa corporal, este sistema reafirma la masa muscular y disminuye la celulitis.
Por cada vacuna que tiene 15 dosificaciones, que se aplica en un lapso de 17 días, (la gente) puede llegar a bajar de 3 a 6 kilos”.
Las personas que no pueden aplicarse este tratamiento son las diabéticas e hipertensas no controladas y mujeres en lactancia o embarazo.
“Lo que hace este producto que es una cadena de aminoácidos, que son compuestos que al juntarse forman proteínas, actúan sobre el tejido graso y sobre los ácidos grasos circulantes evitando que estos se depositen”.
Que se han atendido alrededor de unas 10,000 personas en más de 6 meses, de las cuales un 80% tienen éxito y el resto son personas que “no se quieren comprometer porque le quieren dejar la responsabilidad a una vacuna y creer con eso que pueden seguir comiendo grasas saturadas”.
Al iniciar la aplicación de la vacuna la persona es evaluada por un nutriólogo para controlar sus hábitos alimenticios, además de que es recomendable que el cliente realice actividad física y tome agua.
“La gente que de verdad desea modificar tienen mejores resultados que las personas que esperan que algo simplemente lo cambie por arte de magia. (La vacuna) disminuye los índices de colesterol y triglicéridos, hace que el metabolismo se acelere un poco más, no tiene ‘rebote’ porque la forma en que bajas es de forma paulatina”.
